viernes, 2 de abril de 2010

Alimentos transgenicos alcance


De antemano toda mi gratitud para mi buen amigo Fede por su colaboracion con este espacio de arte y cultura... Espero no sea la primera ni la ultima.

Un alcance sobre alimentos transgénicos.
Por Federico Llosa Sanz.

Escribo este artículo a pedido de mi gran amigo Vigo. Es verdad, el hambre es quizás uno de los males más repudiables por los que atraviesa el mundo y los partidarios de esta denominada tercera revolución verde del cultivo de alimentos transgénicos se basan en que los aumentos en la productividad debido a su uso acabarán con él. Entonces ¿por qué en el 2002, en Zambia, se rechazó el maíz transgénico enviado como ayuda alimentaria a pesar de la amenaza de hambruna que se cernía en dicho país?, ¿por qué en el 2003 un grupo de ciencia independiente advierte al mundo desde Londres en una carta abierta sobre los peligros de este tipo de alimento?, ¿qué tanto sabemos sobre los alimentos transgénicos?, ¿existen alimentos transgénicos en nuestro medio?...

Alimento transgénico es, por definición, aquel al que se ha insertado un gen ajeno proveniente de cualquier otro organismo vivo. El ser humano, desde el principio de la agricultura y ganadería se ha valido de la genética para domesticar y seleccionar mejores variedades. Basta con observar el vasto legado biogenético que nuestros antepasados nos han heredado. Sin embargo, la biotecnología ha permitido interferir con la evolución natural de los animales y vegetales mediante la inserción artificial de genes exógenos con resultados aparentemente maravillosos: cultivos resistentes a plagas, productividades altas, alimentos con mayor valor nutritivo, alimentos con fármacos incluidos, son unas cuantas de las tantas luces que los partidarios de su uso ostentan, en un panorama más bien oscuro.

Son múltiples los riesgos que conlleva el desarrollo de este tipo de alimentos. En términos de seguridad alimentaria, los productores de cultivos transgénicos se han aliado con los proveedores de insecticidas y pesticidas y de semillas, creando un monopolio que condiciona al agricultor- que debe pagar la respectiva patente- a obtener todo el paquete de productos completo. Más aún, las semillas transgénicas se fabrican de tal modo que sus cultivos sean estériles (las denominadas semillas suicidas), dependiendo cada vez más estrechamente de los proveedores. En la India unos 20 000 agricultores se suicidan anualmente desesperados por el engaño de las semillas transgénicas; el instrumento de suicidio: el pesticida, que antes no les era necesario utilizar. El problema se agrava si tomamos en cuenta que los cultivos tradicionales son contaminados por los transgénicos sin voluntad del agricultor. (…)
Poco se sabe sobre los efectos a la salud por su consumo. Sin embargo, investigaciones científicas parecen vislumbrar su efecto alérgeno (productor de alergias), inmunógeno (afecta al sistema inmunológico) e inclusive cancerígeno. En un estudio llevado a cabo con ratas jóvenes alimentadas con productos transgénicos se encontraron efectos sobre el “factor de crecimiento símil”, que es – a grandes rasgos- el responsable de la multiplicación y diferenciación de las células.
Uno de los peligros más graves, sin duda, es que los genetistas pueden crear en el laboratorio-en cuestión de minutos- millones de virus que jamás han existido en miles de millones de años de evolución, cuyas consecuencias pueden ser catastróficas, e incluso amenazar nuestra supervivencia como especie. Esto quedó de manifiesto en el 2001, con la creación “accidental” de un virus letal para el ratón, en el curso de un experimento de ingeniería genética aparentemente inocente.

Debemos ser cautelosos: los productos transgénicos ya están extensamente dispersos en nuestro medio. La Green Peace ha elaborado una lista “Guía roja y verde de alimentos transgénicos” donde se enumeran los productos y marcas que contienen o pueden contener ingredientes transgénicos. El etiquetado aún no es del todo claro en este tema, por lo que recomiendo echar un vistazo a esta lista, disponible online: http://www.greenpeace.org/raw/content/espana/reports/gu-a-roja-y-verde.pdf

jueves, 1 de abril de 2010

Poema rescatado 2008

Mi sonrisa de una noche



Mi sonrisa de una noche tiene el pelo enredado, pero en su descuido, que ahora resulta ser un estilo, me mata. Su pelo negro cubre un segmento de su rostro, aunque en el otro segmento también lo exhibe pero de manera menos amplia por la forma de su postura, canina… su cabello cae sobre su cuello en ondulaciones descuidadas mientras yo me imagino el perfume de naranjo que brotara de cada negro pelo suyo… Todo este paisaje queda adornado por un gancho blanco en forma de flor…

Tiene la mirada fija en algo, fija en mí, en un pequeño átomo del aire.
Mi sonrisa de una noche oculta un pequeño peligro;
Apenas deja, y con ello basta, una pequeña sonrisa en mi rostro
Me alegra en las mañanas en que preparo mi rutina diaria; en ese momento en que empiezo a alistar mis cosas y la recuerdo, recostada en el piso

Mi sonrisa de una noche viste de negro
Y se desviste de noche al ritmo de mi sonrisa.

Mi sonrisa de una noche combina perfectamente todo su cuerpo,
Mi sonrisa de una noche hace que yo cambie,
ahora soy otro,
Y ahora otro y otro y otro y otro! Porque la vi, agazapada en su pose de “top model” (y yo que odio a las “top model”) apoyada en el suelo con sus rodillas y sus manos dejando al descubierto un sensual segmento de sus pequeños pechos que brotan de juventud y escapan a la niñez sin temor. Con su mirada que nuevamente me dice algo, pero muy bajito.
No puedo ver sus brazos, pero me los imagino tan fáciles de acariciar como su cuelo o la tez de su rostro que ahora recuerdo, queda perfectamente enmarcada en mi historia por un divino haz de luz que llega desde el cielo como cuando se ilumina algún sabio o algún santo de alguna iglesia…

Mi sonrisa de una noche viste a la moda y deja a mi vista (felizmente) su cintura calida y tierna. Esta si refleja sus últimos años de niñez pero en mí despiertan una curiosidad casi morbosa…

Mi sonrisa de una noche no sonríe y eso me dice mucho… es una mueca que jamás conocí y por consiguiente me enamora.





Cusco 07 de mayo del 2008